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El cubano que apareció ahorcado en la ciudad de Ojinaga, del estado Chihuahua, en la frontera de México con EEUU., fue identificado como Eddy Sánchez. Su cuerpo fue encontrado colgado de una escalera de hierro en el patio trasero de la vivienda que compartía con otros cubanos.

En su relato describe a Eddy como un gran amigo, solidario y "un enamorado de su pequeña niña de cuatro años que dejó en Cuba". Eddy había ingresado al continente norteamericano por Nicaragua, hace un año. Desde hace cuatro meses residía en la ciudad fronteriza de Ojinaga, donde trabajaba como soldador.
"Eddy era un ser bueno, alegre, pero desde hace días se le veía callado y pasaba horas meditando en el patio donde se quitó la vida", lo recuerda Ángel Granados.  
Según lo descrito por este, el cuerpo de Eddy estuvo colgado durante nueve horas, y tan solo a la 1:00AM de hoy fue recogido por la Policía federal y el personal forense.
"Han sido las horas más largas de mi vida, es un dolor que no podré arrancar de mi corazón, ver el cuerpo colgando de mi amigo sin poder hacer nada", relató.
Según la información  de sitios digitales, Eddy Sánchez celebró su cumpleaños número 51 el 11 de agosto, con sus amigos cercanos y compañeros en la búsqueda del sueño americano. "Lo quiero recordar, como la persona llena de ilusiones y alegre, esa es la imagen que guardaré por siempre, la de su cumpleaños", dijo Ángel Granados.
Por último, expresó que las razones de Eddy eran entendibles, pero no las compartía. "La vida del emigrante cubano es muy dura, sufrimos muerte, estafas, xenofobia, explotación laboral y estamos sin salida aquí en la frontera. Pero quitarse la vida no debe ser una opción."
Según Ángel Granados, el hijo de Eddy Sánchez viaja en este momento desde EEUU, donde es residente, a recoger el cadáver de su padre.